Se pasa más tiempo hablando que haciendo cualquier otra actividad íntima

Continuamos con la última parte del artículo sobre los problemas de comunicación en la pareja. Seguimos con nuestro índice y comenzamos en este artículo por el problema 4 de la comunicación en parejas. Te dejo el link para que puedas completar con la primera parte:

5 problemas frecuentes de comunicación en pareja. Parte I

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Establecer límites en pareja

Problema 4: “Mi esposo no quiere ni pensar ni hablar de emociones”.

“Mi mujer está obsesionada con el tema de los sentimientos y emociones”

“Mi esposo es como un bloque de granito. Si solo se permitiera sentir, sería más persona”

Tanto en clínica como en los estudios al respecto, se desprende que hombres y mujeres experimentan los sentimientos y los expresan de diferente manera. Siempre hay excepciones, claro.

Las mujeres tienden más a acentuar el aspecto emocional, mientras que los hombres se inclinan más por analizar la situación de forma más racional. Desde luego, como en la mayoría de las generalizaciones que se hacen, podemos encontrar el caso opuesto. Pero en general, ellos te envían señales por canales diferentes. Y cada uno cree que el otro está en otra onda.

Hay reacciones que perjudican y otras que ayudan al compartir cualquier problema vivido, y merece la pena conocerlas. Veamos algunas:

Posturas comunicativas que ayuda y/o perjudican una adecuada conversación en pareja

√. Posturas, frases, que ayudan a la buena comunicación: Para entender una postura más emocional y así ayudar al otro podemos usar una frase tipo: “Comprendo por qué estás disgustada, ya que pusiste tanto esfuerzo y premura en el informe. Esperabas que tu jefe reaccionara de otra manera y no hizo ni caso”, “Entiendo cómo te debes sentir”.

Aunque no estemos de acuerdo necesariamente con la decisión o actuación de tu pareja, una frase de este tipo implica que nos hacemos eco de su decepción y validamos su emoción, aunque no convenimos si el jefe es injusto o un auténtico bastardo.

También ayudaría preguntas tipo: “¿Tu jefe suele ignorar los informes que se le dan?”, “Qué piensas de la actitud que tuvo?. Así ayudas a tu pareja a escudriñar sus sentimientos y a hablar más de su sentimiento de agravio y quizá de las acciones del jefe que hicieron que ella dudara de su propia competencia. Ayudas a que el otro ventile de forma catártica sus emociones.

√. Posturas, preguntas, que perjudican la comunicación: Hay reacciones que, aunque pudieran ser bien intencionadas debes evitar si quieres conservar el buen clima comunicacional. Son Reacciones que no debes adoptar y que agravan el problema de tu pareja son tipo: “¿Por qué te alteras tanto este tema?”, “¿Por qué necesitas la aprobación de la gente todo el tiempo?”.

Este tipo de reacciones quitan importancia al asunto y, por tanto, invalidan el sentimiento de tu pareja, con lo que acaban agravando la aflicción del otro.

Los hombres en especial y en general, deben darse cuenta, que cuando alguien se siente agraviado, desea un paladín, un protector, no un analizador.

Los hombres, al usar más una aproximación realista, racional, solucionadora, parecen disculpar la conducta del jefe o de la persona que agravia, lo cual implica para el agraviado que no tiene derecho a sentirse mal o disgustado. Por lo que es invalidado su sentimiento.

Por supuesto, el cónyuge, a veces, desea sólo un consejo práctico y no quiere hablar de sentimientos. El no reconocer esa preferencia también puede llevar a la desilusión y a la frustración.

Para muchas mujeres es muy importante que los maridos/parejas, hablen de sus propios sentimientos ya que hacen que se sientan más estrechamente unidas y conectadas emocionalmente a ellos y viceversa.

La mayoría de los hombres, son menos introspectivos o reflexivos que las mujeres, y por tanto, parece no ser tan conscientes de sus sentimientos.

Muchos maridos toman a mal la idea que esta falta aparente de introspección sea una especie de déficit, pero hasta el mas desconectado de sus sentimientos, puede echar un puente a su mujer/pareja discutiendo los sentimientos de ella. No cuesta nada. Y al armonizar más con sus sentimientos, puede a su vez, sensibilizarse mas respecto a los propios.

Problema 5: La relación está estancada aunque la comunicación fluye.

Muchas relaciones que parecen superficialmente satisfactorias, pueden no serlo para ambos esposos. Pueden desenvolverse bien juntos, al conducir la economía, al tomar importantes decisiones domésticas y al criar niños felices y bien educados. Puede parecer que cumplen con el pacto matrimonial no escrito, pero realmente, están aburridos o  desdichados el uno con el otro.

Puesto que los cónyuges parecen hacer todo en la forma correcta de cara a la galería, debemos mirar bajo la superficie para comprender su problema.

¿Hay pobreza o riqueza en tus conversaciones de pareja?

Muchos factores pueden influir, por supuesto, y dependerá del caso concreto, pero uno fundamental para el declive del matrimonio suele estar en la pobreza o riqueza de su conversación.

√. No se aportan temas de interés para el otro.

√  La ligereza o el divertimento de sus conversaciones han desaparecido.

√. No se realizan esfuerzos en distraer o divertir al otro.

¿Qué es lo que ha despojado a la pareja de una conversación rica y placentera?

1.- Diferencias de puntos de vista, diferente categoría de valores… El flujo de la conversación se inhibe por la amenaza de intrusiones de conflictos no resueltos de fondo aunque sí superficialmente. Conversaciones armoniosas son interrumpidas por señales de posible discordias que interfieren la comunicación.

2.- Aunque los cónyuges se lleven bien cuando se trate de problemas prácticos, su conversación puede carecer de referencias a aspectos placenteros. No han aprendido a delimitar las discusiones. Así cuando uno inicia la conversación con un comentario afectuoso, es posible que el otro decida sacar a colación algún conflicto. Como consecuencia, hay escasez de comunicación que gire alrededor a expresiones de interés, participación y afecto.

La Diversión, la Alegría y el Humor es el antídoto contra las riñas 

Algunos matrimonios se achantan en la seriedad y pierden el sentido de la alegría.

La combinación del tremendismo, el catastrofismo y  las luchas de poder, echan un paño mortuorio sobre la relación. La pareja entonces queda exhausta, después de las continuas riñas y mutuas recriminaciones. Se quejan de no tener ya nunca alegría.

El humor y la diversión es un componente importante y un antídoto contra las riñas.

Se requiere sutileza y esfuerzo al hacer humor, no vaya a parecer que ser gracioso es ser equivalente a sarcástico o fastidioso. No confundamos con el humor negro ni salido de tono.

Ser uno mismo el blanco de la broma, es más provechoso que hacer objeto de ella al cónyuge.

Aunque pueda parecer prosaico invocar a las vacaciones y a las escapadas sin hijos; éstas brindan, a veces, a la pareja un tiempo y un espacio necesario para redescubrir lo lúdico y quizás, para reanimar un matrimonio/pareja que se malogra. Pero no hace falta tampoco irse a las Bahamas para desconectar y tener un espacio lúdico.

«Los más grandes logros del ser humano vienen por hablar. Y los más grandes fracasos por no hablar» Stephen Hawking,

Habla y sigue hablando, pero habla de forma amable, afectuosa, considerada, esto no implica tampoco tanto esfuerzo, no?

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Bibliografía:

-«Con el amor no basta». Beck, A.T. (2011)

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